EL VIAJE

            El mar en pequeñísimos retazos

Llega a mis ojos  mientras el sol

Se solaza en esa planicie

 Que con destellos de plata

Me encandilan

Mientras recorro la vía

Cual serpiente de asfalto disecada

Me llevará al reencuentro de historias

Pretéritas esperadas y temidas

El paisaje que me rodea, se vuelve árido

Los cerros cuales gigantes dormidos

Sedientos de agua, se conforman  

Con la escasa que les regala

La mano generosa de la niebla

Y son el reflejo de nuestra llegada

Recuerdo tu voz, tus manos

Voy ansiosa a tu encuentro,

Que se me hace eterno

Te busco y te encuentro, amiga